La candidata a la jefatura de gobierno por la coalición “Sigamos Haciendo Historia”, Clara Brugada aseguró que buscar que la Ciudad de México sea la “más incluyente y accesible” del país.
En el Museo Interactivo de Economía en el Centro Histórico, la morenista señaló que creará el Centro de Apoyo de Personas con Discapacidad, que impulsará más de 20 acciones en pro de más de 600 personas que están en este sector de la población.
“Tendremos la oportunidad de que en seis años sea la ciudad más incluyente… vivimos en una ciudad metropolitana necesitamos no solo convertirnos en incluyente sino para todos la que la visitan todos los días”, añadió.
Agregó que uno de sus puntos principales será suscribir convenios de colaboración con empresas para “incrementar significativamente el número de personas con discapacidad que acceden a los empleos”.
Asimismo, dijo que priorizarán en licitaciones a empresas que estén contratando a personas con discapacidad.
Pidió a los candidatos a diputados federales y el senado a promover iniciativas para poner por ley la “inclusión obligada para empresas y unidades económicas de la capital”.
“No hay mejor política social, esto lo aprendí con los empresario, que un apoyo social no va a reemplazar el derecho de ustedes de emplearse económicamente”, apuntó.
Añadió que “hemos estado pensando en hacer un gran lugar, una utopía y museo donde nos concienticemos sobre todo el espacio públicos que tenemos por un momento pasemos las distintas realidades de las personas con discapacidad”.
Destacó que va por la creación de la licenciatura en lengua de señas mexicana y promoveremos la profesionalización y justa remuneración de los intérpretes.
Refirió que otras propuestas son: el sistema público de cuidados, la construcción de 100 centros de rehabilitación, programa de apoyo a las personas cuidadoras de personas con discapacidad y sus familias, hacer 100 por ciento accesible el metro, una campaña contra la discriminación, y educación bilingüe (español y lengua de señas mexicanas).
Finalmente dijo que hará una adecuación histórica de baños y edificios públicos para que sean más amigables con las personas con discapacidad, las calles contarán con cruces accesibles, señalamientos adecuados, lugares de descanso, semáforos audibles e información puntual, habrá cero tolerancia a la violencia sexual en contra de las personas con discapacidad y los botones de pánico serán respondidos por videollamadas para las mujeres sordas.