El Primer Tribunal Colegiado de Apelación en Materia Penal revocó una resolución para permitir a la Fiscalía General de la República (FGR) presentar como prueba las declaraciones de César Freyre Morales, un sentenciado en el caso del secuestro y homicidio de Hugo Alberto Wallace.
Estas declaraciones incriminan a Jacobo Tagle Dobin y Brenda Quevedo Cruz, y la FGR busca demostrar su responsabilidad en el crimen.
El tribunal declaró fundada la impugnación del Ministerio Público Federal, que apeló la decisión del juzgado Décimo Sexto de Distrito de Procesos Penales Federales por no aceptar la prueba.
El expediente se relaciona con César Freyre Morales, a quien se le practicó el Protocolo de Estambul por la entonces Procuraduría General de la República (PGR), demostrando que no fue torturado.
La resolución del tribunal destaca que la prueba presentada por la FGR es oportuna y relevante, ya que busca demostrar que las declaraciones de Freyre, que incriminan a Tagle y Quevedo, no fueron obtenidas bajo tortura.
La denegación de esta prueba limitaría el derecho de la fiscalía a sustentar su acusación.
Isabel Miranda de Wallace, activista y madre de la víctima, comentó sobre el caso, mencionando que Freyre presentó una supuesta recomendación de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) para afirmar que había sido torturado.
Sin embargo, desconocía que existía una determinación previa que demostraba lo contrario y validaba el Protocolo de Estambul practicado en su contra.
Miranda de Wallace también señaló que la resolución indicaba que no se debía repetir el Protocolo de Estambul, ya que la CNDH había confirmado su correcta aplicación en el caso de Freyre.
La admisión de esta prueba por parte del tribunal podría tener implicaciones significativas en el desarrollo del juicio y la determinación de la responsabilidad de los acusados en el crimen de Hugo Alberto Wallace.