Los buenos recuerdos valen más que todo el dinero del mundo, o al menos así lo piensa esta abuelita que rechazó 20 millones de pesos por la casa en la que vivió con su madre. Los desarrolladores de un centro comercial tuvieron que adaptarse y modificando su diseño para rodear la propiedad. Actualmente, se puede observar la pequeña granja en medio del gran centro comercial.
Aunque esta historia sucedió hace ya unos años, no ha dejado de dar la vuelta al mundo y se viralizó recientemente en redes sociales por lo divertida que se ve la casa en el centro del gran complejo.
La mujer llamada Edith Macefield se convirtió en una heroína de Seattle cuando rechazó un millón de dólares a cambio de su pequeña propiedad.
La casa fue adquirida por 70 mil pesos en 1953, y Edith vivió ahí junto su madre Alice desde entonces. La inmobiliaria logró comprar todas las propiedades de la zona excepto esa.
No hubo dinero suficiente que convenciera a Edith de vender su propiedad de 108 años de antigüedad. Fue así como la anciana obligó a la inmobiliaria a construir a su alrededor. Ella no tenía intenciones de vender, quería pasar el resto de sus días en el hogar que compartió con su madre.
Finalmente, el gerente de la construcción adaptó sus planes y no insistió más. Incluso entabló una relación amistosa con la abuelita a quien visitaba con frecuencia, compartiendo alimentos e incluso llevándola al médico.
