Este miércoles, ante la presión de sus socios, Alemania autorizó el envío de tanques de combate Leopard a Ucrania, que los reclamó con insistencia para defenderse mejor de la invasión rusa.
Alemania entregará a Ucrania 14 tanques Leopard 2A6 procedentes de las reservas de su ejército, anunció el portavoz del gobierno, Seffen Hebestreit.
Al mismo tiempo, Berlín permitirá a los países europeos que lo deseen suministrar a Kiev los blindados que tienen, tal como venía exigiendo Polonia, muy activa en esta cuestión.
«Hacemos lo necesario y lo posible para apoyar a Ucrania. Al mismo tiempo, debemos impedir que el conflicto escale a una guerra entre Rusia y la OTAN», declaró el jefe del gobierno alemán, Olaf Scholz, ante la cámara baja del Parlamento.
El jefe de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que estos carros de combate pueden ayudar a Ucrania a «ganar» la guerra. Y el presidente ucraniano Volodimir Zelenski transmitió a Scholz su «sincero agradecimiento».
En Berlín, el embajador ruso alertó de que la decisión es «extremadamente peligrosa» y «llevará el conflicto a un nuevo nivel de confrontación».
«Esto nos convence una vez más de que Alemania, al igual que sus aliados más cercanos, no quiere una solución diplomática a la crisis ucraniana y que quiere una escalada permanente», declaró el embajador Serguéi Nechaev.