La Cámara de Diputados aprobó en el Pleno, el tercero de los dictámenes correspondiente a una de las 18 reformas enviadas por el Presidente saliente de la República, en este caso en materia de Guardia Nacional (GN).
El proyecto entrega el mando operativo y la administración de la corporación de seguridad a la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA), se aprobó al grito de “¡sí se pudo!”, por parte del bloque mayoritario.
Las bancadas del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde (PVEM), accionaron la aplanadora.
En lo general, emitieron 362 votos a favor, lo que configuró la mayoría calificada.
La oposición del Partido Acción Nacional (PAN), Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Partido Verde (PVEM), dio 133 votos en contra.
De madrugada, alrededor de las 03.40 horas de este viernes 20 de septiembre, se registró la votación particular.
Morena y aliados aprobaron el proyecto con 353 votos a favor y 136 en contra, por lo que nuevamente hubo mayoría calificada.
Sólo se aceptó una modificación al dictamen, para establecer que la Guardia se conformará por “personal militar” dejando fuera a integrantes de la Marina.
El dictamen con el cambio referido, notificó la Mesa Directiva, será enviado al Senado de la República.
Horas antes, alrededor de las 20:00 horas, inició la discusión particular, momento en que las largas horas de intercambio de insultos y acusaciones hicieron perder la calma a los bloques antagónicos.
El acumulado de señalamientos y ofensas obligaron a los coordinadores parlamentarios a intervenir para exigir elevar el nivel del debate donde las palabras “hipócritas”, “incongruentes”, “militarizar” y “mentir”, se repitieron una y otra vez.
Ante las advertencias mutuas del líder de Morena, Ricardo Monreal y el vicecoordinador de PAN, José Elías Lixa, respecto a que sus bancadas responderían a ofensas e insultos en la misma medida e incluso con la misma “furia”, la lista de más de 430 reservas con propuestas de modificación al proyecto, se redujeron, al igual que el número de oradores.