Contra todo pronóstico, el peso mexicano se está desempeñando mejor que cualquier otra moneda de una economía emergente, algo que tiene muy sorprendido a Wall Street. A pesar de que el país no ha mostrado mucho crecimiento desde 2019, la apreciación de su divisa destaca entre sus pares.
Esta semana, economistas de Bank of America publicaron un reporte anunciando que la fortaleza del “súper peso”, el cual estiman que se ha apreciado contra el dólar en un 17,5% desde abril de 2020, permanecerá.
De acuerdo con diferentes analistas, uno de los factores que hoy contribuyen al fortalecimiento del peso mexicano fue que, a diferencia de países que implementaron amplios programas de ayudas sociales, el presidente López Obrador resistió presiones y se rehusó a incrementar el gasto para contener la deuda. “Una postura fiscal estricta es algo que gusta a los inversores en los mercados de renta fija. También ha mantenido a raya a las agencias de calificación”, agregaron los analistas.
Otro factor es que el Banco de México ha incrementado su tasa de interés referencia consistentemente desde mediados del año pasado para hacer frente a la inflación derivada de la pandemia y los estímulos económicos en países desarrollados. La tasa de interés en México pasó del 4% en marzo del año pasado al 7% actual.
Además el peso mexicano tiene ciertas ventajas frente a otras monedas emergentes. Su alta liquidez en los mercados financieros globales y el hecho de que cotiza 24 horas del día durante cinco días de la semana la hace la favorita de los operadores.
Es por esto que, cuando el peso mexicano aguanta fuertes presiones para mantenerse estable, los analistas utilizan la expresión “súper peso”. Hoy en día, su estabilidad a pesar de la pandemia, las guerras y la inflación le han ganado ese título.