El mes pasado, dos mujeres fueron atacadas cuando regresaban a su casa por un sujeto que violó a una de ellas. La víctima logró zafarse y aplicar al agresor un movimiento de jiu-jitsu que lo mató casi al instante.
Su amiga había logrado escapar para pedir ayuda, pero para cuando llegaron los vecinos el violador estaba muerto gracias ese movimiento conocido como “estrangulamiento trasero desnudo”. Así lo informó el periódico Clarín.
“Habrían disfrutado de la noche y cuando regresaban a su casa se les acercó un tipo que violó a una de ellas. La mujer logró deshacerse de él y atacarlo con un estrangulamiento. Terminó matándolo”, explicó la teniente Beatriz Miscow, de la Policía Militar, en entrevista con “Brasil Urgente”, un programa de televisión de ese país.
La mujer agredida fue trasladada al Hospital Pérola Byington.
El tipo de estrangulamiento que utilizó la víctima para defenderse es la sumisión más conocida en el mundo y se practica en todo tipo de arte de agarre. Es un movimiento que corta la sangre al cerebro en segundos.
El jiu-jitsu brasileño es un deporte de combate de autodefensa bajo el precepto de que un luchador más pequeño y débil utilice con éxito el apalancamiento y la distribución del peso para defenderse de oponentes más fuertes y pesados, como en este caso.