El presidente Andrés Manuel López Obrador descartó tener un diálogo con el embajador Ken Salazar, embajador de Estados Unidos en México, tras manifestar que la reforma judicial afectaría la democracia en México y la relación comercial, y lo criticó por su intervencionismo.
“No es posible que un embajador extranjero opine lo que está bien y lo que esta mal en nuestro país. Esa no es una función de un embajador. (…) Ya lo dije, hay embajadores que han hecho peores cosas porque se los han permitido” y citó al embajador a Henry Lane Wilson que organizó el golpe de estado contra Francisco I Madero, desde la sede de la embajada.
Advirtió que ese es un tema de independencia y soberania que sólo le correspone a México, y que él no se mete en el tema de venta de armamentos de Estados Unidos para hacer la guerra en otros países.