Políticos estadounidenses insisten en declarar a los cárteles mexicanos del narcotráfico como grupos terroristas, y este miércoles dieron paso más en esa dirección con la presentación de dos proyectos de ley que abogan por esa designación y por autorizar la actuación del Ejército.
Los republicanos Roger Marshall y Rick Scott introdujeron su normativa en respuesta al secuestro de cuatro estadounidenses el pasado viernes en la ciudad de Matamoros, en la frontera con Texas, y al asesinato de dos de ellos.
En su punto de mira están los cárteles del Golfo, el del Noreste, el Jalisco Nueva Generación y el de Sinaloa y además de calificarlos como terroristas prohibiría a sus integrantes la entrada a Estados Unidos, autorizaría a congelar sus bienes y prohibiría a cualquier persona ayudarles de forma consciente.
“Han aterrorizado a los estadounidenses durante décadas. Vamos a destruir su modelo de negocio y su estilo de vida porque nuestra seguridad nacional depende de emprender una acción decisiva”, apuntó Graham en una conferencia de prensa.
Su proyecto de ley será introducido “dentro de unos días” y promueve también declarar a esos cárteles como organización terrorista extranjera para poder activar más mecanismos contra ellos.
Los senadores también quieren que se autorice al Ejército estadounidense a intervenir contra esas organizaciones “estén donde estén”. “No para invadir México ni derribar aeronaves mexicanas, sino para destruir sus laboratorios” y sus redes, dijo Graham.
“Esperamos hacerlo en colaboración con los países donde estén, pero si lo tenemos que hacer por nuestra cuenta, lo haremos solos”, advirtió.
Con información de EFE