De Egipto, El Salvador y Pero, son los seis migrantes asesinados por militares en Chiapas, entre ellos una niña, -quienes además dejaron lesionados a otros 12-; los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), ya están detenidos y son investigados por la Fiscalía General de la República (FGR), informó la presidenta Claudia Sheinbaum.
Este jueves, en su conferencia mañanera, la mandataria calificó como lamentable ese hecho, que será investigado y sancionado.
Sin embargo, las indagatorias buscan conocer si hubo alguna orden de un mando para disparar contra los migrantes, a quienes habrían confundido con delincuentes, pese a haber mujeres y niños, en Chiapas.
“Es un hecho lamentable y tiene que ser investigado y sancionado. Los elementos de la Sedena que dispararon ya están puestos a disposición de la FGR, que se encargará de la investigación sobre cómo ocurrieron los hechos, responsabilidades, de mando o de los soldados que dispararon”, dijo.
Y añadió que “no puede repetirse una situación así”, añadió la presidenta y precisó que se están tomando las medidas necesarias para evitarlo.
Hizo saber que la secretaría de Gobernación está en contacto con las embajadas, y se dará apoyo a los familiares de migrantes victimados.
Fue noche del 1 de octubre, cuando militares abrieron fuego contra un grupo de migrantes, resultando en la muerte de seis personas, incluyendo una niña de 11 años, pero además, otros 10 migrantes resultaron heridos.
El incidente ocurrió en la carretera de la comunidad Villa Comaltitlán, cerca de la frontera con Guatemala. Un grupo de 33 migrantes de diversas nacionalidades fue atacado por militares, lo que provocó la muerte de cuatro personas en el lugar y dos más en el hospital donde recibían atención médica.
“Personal militar (…) identificó a 33 migrantes de nacionalidad egipcia, nepalí, cubana, hindú, pakistaní y árabe, de los cuales cuatro habrían fallecido, 12 lesionados y 16 ilesos”, informó la Sedena justo el 2 de octubre, en un comunicado.