Tras una campaña de denuncias y gestiones ante las autoridades, vecinos de Polanco y Lomas de Chapultepec lograron la clausura de varios tótems publicitarios ilegales que proliferaban en la zona, pero ahora piden evitar su expansión porque ya se instalaron en la alcaldía Benito Juárez, en Insurgentes y Río Churubusco.
Estas estructuras, de más de 10 metros de altura, carecían de los permisos necesarios y representaban una violación a la Ley de Publicidad Exterior de la Ciudad de México, la Ley de Protección Civil, y las normas de protección del patrimonio cultural.
La instalación de los tótems, ubicados en importantes avenidas como Reforma, Prado Sur y Masaryk (esta última, zona de patrimonio cultural arquitectónico), generó preocupación entre los residentes por la contaminación lumínica, el impacto visual negativo en la estética urbana, y los riesgos para la seguridad de peatones y automovilistas. La excesiva luminosidad de los anuncios, según denunciaron los vecinos, excedía ampliamente los límites legales, afectando la visibilidad y la tranquilidad de la zona.
La acción ciudadana se centró en dos frentes: denuncias directas a las autoridades y gestiones ante senadores de la Comisión de Zonas Metropolitanas de la Cámara Alta. Se presentaron oficios a los senadores solicitando su intervención para presionar a las autoridades capitalinas y evitar la proliferación de estas estructuras. Esta estrategia resultó efectiva, culminando con la clausura de los tótems.
Guillermina Salas, vecina de la zona, destacó la amenaza que representaban estas estructuras para la seguridad, estética y tranquilidad de la zona. “Agradecemos la intervención de los senadores y las autoridades capitalinas para la suspensión de estas estructuras; ahora solicitamos que se eviten más instalaciones similares, porque sabemos que se están expandiendo a Río Mixcoac e Insurgentes en Manacar, donde ya colocaron un tótem luminoso ilegal”, indicó.
María Elena Fernández, otra residente, enfatizó la importancia de las solicitudes a los senadores: “Nos preocupaba nuestra seguridad”. Edgar Méndez, presidente de la Asociación Civil Rescatando el Paisaje Urbano, añadió que la clausura representa una victoria en la lucha contra la contaminación visual y la violación de las leyes de protección al patrimonio cultural. La asociación ha sido un actor clave en la denuncia de estas irregularidades, recordando que las estructuras violan la Ley de Publicidad Exterior y la Ley de Protección Civil, incluyendo la prohibición de construcciones de gran formato a menos de 150 metros de zonas de patrimonio cultural.
La clausura de los tótems es un primer paso, pero los vecinos continúan exigiendo a las autoridades una acción contundente para prevenir futuras instalaciones ilegales y retirar las estructuras ya existentes en otras zonas, como las mencionadas en Río Mixcoac e Insurgentes. La lucha por preservar el patrimonio cultural, la seguridad pública y la calidad de vida en estas zonas exclusivas continúa.
