En los últimos años, México se ha convertido en el refugio de miles de estadounidenses, quienes obtienen más valor por su dinero al comprar casas baratas frente al mar y arena blanca de la playa de Cancún, Tulum, Puerto Vallarta, Los Cabos y otras ciudades.
Tan solo en dos meses de este año el sector inmobiliario vendió más de 300 departamentos a estadounidenses, especialmente habitantes radicados en California, quienes pagaron más de 5 millones de pesos por alguna propiedad en Tijuana.
Este comportamiento no es nuevo, pero sí ha incrementado desde el inicio de la pandemia. Lugares como Los Cabos, Puerto Vallarta y San Miguel de Allende son ciudades para los retirados y jubilados, mientras que Tijuana se está convirtiendo en un corredor de turismo de salud y dental para los californianos, añade el directivo.
Tijuana, una ciudad que no es vacacional, ha registrado una alta venta de departamentos para personas que trabajan en San Diego: “Se han dado cuenta que vivir y adquirir un departamento en Tijuana cuesta la quinta parte que un departamento en San Diego”, dice Eugene Towle, socio director de Softec.
El encierro que provocó la pandemia también despertó en las personas de otros países la curiosidad de vivir en un lugar más amplio, con mejor clima y menores restricciones. “Al principio la gente que estaba llegando decía: ‘mira, me voy a venir un mes a México y a ver qué onda’”, comenta el directivo de la empresa especializada en consultoría e investigación inmobiliaria. Después, añade, se dieron cuenta de que desde México pueden trabajar, ganar en dólares y gastar en pesos.
Este año, las ventas de departamentos de lujo frente a la playa en México aumentarán más de 32.08%, ya que se prevé que sean vendidas más de 15 mil 605 unidades.
Es importante destacar que la mayor parte de los extranjeros que adquieren casas y departamentos en México lo hacen de contado, ya que no hay créditos ni hipotecas para clientes provenientes de Estados Unidos, Canadá y otras partes del mundo.
